Regresar al Blog

¡Esto curó mi ansiedad! Cómo puedes liberarte de la ansiedad

ansiedad anxiety estres May 08, 2025

Hola, alma bonita que me lees. Hoy quiero platicarte de corazón sobre un tema que sé que muchas hemos vivido en silencio: la ansiedad. Si alguna vez has sentido esa presión en el pecho, dificultad para respirar, o simplemente una inquietud que no te deja estar en paz, quiero que sepas que no estás sola. Yo también pasé por ahí, y hoy quiero compartirte lo que realmente me ayudó a sanar mi ansiedad, paso a paso, de una forma sencilla y muy humana, al estilo de esta comunidad.

El primer paso: aceptar y reconocer la ansiedad

Lo primero que hice fue aceptar que tenía ansiedad. Muchas veces sentimos síntomas físicos o emocionales y ni siquiera nos damos cuenta de que lo que estamos viviendo es ansiedad. Yo, por ejemplo, sentía una presión en el pecho y me costaba respirar, a veces en lugares públicos, otras veces en mi propia casa, a cualquier hora del día o la noche. Al principio no entendía qué pasaba, hasta que me hice consciente: “esto es ansiedad”. 

Reconocerlo fue liberador, porque entendí que el problema no era “yo”, sino una reacción de mi cuerpo y mi mente. No dejes que nadie te diga que “es solo cuestión de mente” o que “lo puedes controlar fácil”. Lo importante es que tú seas la primera en darte cuenta y aceptarlo, sin juicio.

El segundo paso: descubrir qué la ocasiona

La ansiedad no aparece de la nada. El siguiente paso fue preguntarme: ¿qué me está generando ansiedad? Hice una lista de situaciones, actividades y hasta alimentos que notaba que me disparaban los síntomas. Por ejemplo, descubrí que la cafeína (en el café, el té verde y otras bebidas) me hacía sentir peor. Así que empecé a reducir o eliminar esos alimentos, y noté una gran diferencia.

También, me di cuenta de que el uso excesivo de redes sociales y la comparación constante con otras personas me generaban mucha ansiedad. Seguir cuentas que, aunque tenían mensajes positivos, en ese momento de mi vida me hacían sentir frustrada o insuficiente, era como echarle leña al fuego. Aprendí a ponerles pausa, dejar de seguirlas, y regresar solo cuando me sentía lista.

Haz tu propia lista: ¿qué personas, actividades, alimentos, hábitos o incluso pensamientos te generan ansiedad? Escribe todo, aunque parezca pequeño.

El tercer paso: cuidar lo que consumes (no solo comida, también contenido)

Empecé a ser muy selectiva con lo que consumía, no solo en mi plato, sino en mi mente y mis emociones. Dejé de ver contenido que me alteraba, bajé el tiempo en redes sociales y me enfoqué en actividades que me hacían sentir bien, como la lectura, la meditación, caminar al aire libre o simplemente desconectarme del celular un rato.

Recuerda: lo que ves, escuchas y a quién sigues en redes también alimenta (o envenena) tu mente y tu corazón.

El cuarto paso: paciencia y compasión contigo misma

Sanar la ansiedad no es de la noche a la mañana. Es un proceso, y cada persona lo vive a su ritmo. Sé paciente contigo, celebra cada pequeño avance y no te juzgues si un día vuelves a sentirte ansiosa. Lo importante es que ahora tienes herramientas y consciencia para no dejar que la ansiedad controle tu vida.

Un consejo extra: busca apoyo si lo necesitas

Si sientes que la ansiedad es muy intensa o no logras manejarla sola, busca ayuda profesional. No es debilidad, es un acto de amor propio. También puedes apoyarte en talleres, grupos de apoyo o recursos que te ayuden a entender y transformar lo que estás viviendo.

Mi invitación para ti

Si quieres profundizar en tu proceso de sanación y descubrir cómo sanar desde la raíz, te invito con mucho cariño a mi taller Sanando mi Niña Interior. Ahí trabajamos juntas para liberar esas emociones guardadas, transformar creencias limitantes y recuperar la paz y la alegría que mereces.

Haz clic aquí para registrarte y comenzar este viaje de sanación. Tu bienestar es prioridad. 

Cuéntame en los comentarios, ¿qué te ha funcionado para calmar tu ansiedad? ¿Qué te gustaría intentar de estos pasos? Te leo y te abrazo fuerte, con todo mi cariño.

 

Con amor,
Vero Gutiérrez

¡No te pierdas de nada!

Te enviaré artículos para que sigas mejorando tu vida, te mantengas motivada y te enteres de las ofertas que tenemos para ti.

Tampoco nos gusta el SPAM. Mi equipo y yo nunca te enviaremos información que no sea útil para ti.